Pareja de lámparas de cristal amarillo mate, con remates de acero. Tienen en el metal alguna huella de uso.
Las lámparas de techo de diseño nórdico, si es posible, se cuelgan bajas para conseguir una luz acogedora. Estas pequeñas quedan muy bien en una esquina encima de una mesita o de un lugar de lectura.